martes, 23 de junio de 2009

Hablando claro.


Hablemos claro,
la luna sin ti no alumbra,
los días sin ti son solo el tiempo que dejo pasar,
y compañía es igual a soledad.

Hablemos claro,
te guardo un espacio,
y sin pensar que volverás
yo te sigo esperando.
Los motivos vienen y van.

Hablemos claro,
no hay momento en que no te piense,
ni sonrisa que no te reclame.
No hay un sólo átomo de aire que no te necesite,
y yo no acepto la idea de olvidarte.

El rojo es azul,
y en los días no hay sol,
el calor me congela,
y el reloj no avanza más.

Los recuerdos, traidores, se escapan sin permiso
y me dejan de regalo, momentos del pasado.

Nada sigue igual,
hablemos claro, te extraño.

martes, 16 de junio de 2009

Hoy, sin mentir.

Pensaré en ti, porque siendo sincera te extraño.
Te diré que te quiero, pero sin mentirte no espero una respuesta.

Y no quiero saber que hoy te hace feliz,
que encontraste en ella mi sonrisa, o algún motivo más.
No quiero recordar que no te tengo,
y que si el mundo acaba hoy,
será ella quien morirá en tus brazos.

Pensaré en ti y en el recuerdo que dejó tu partida,
yo estaré bien,
sin mencionar que no recordare tus ojos contra los míos,
la guerra del querer, o aquellas promesas, que hoy no tienen sentido ya.

Y no quiero saber que es mejor que yo,
que encontraste junto a ella un nuevo mundo,
no quiero recordar que tu sonrisa son lágrimas del cielo en mi suelo,
o que tu vida en mí es una lágrima también, que al caer tiene sabor a derrota.

No quiero saber que es mejor así,
no quiero recordar que nadie te ha querido como yo.

Pensaré en ti, y en las ganas de verte que hoy siento,
yo estaré bien,
sin mencionar que no recordare tus labios rozando los míos,
la idea de creer que todo estaría bien, siempre, contigo.

domingo, 7 de junio de 2009

No lo olvides.

Desapareces, como siempre, entre la gente.
Pasas desapercibido, con esa media sonrisa orgullosa.
Cuando intentas ser distinto, como todos,

logrando ser únicamente una copia del resto.
Eres uno más, ¿no lo notas?
Nada de especial.
Cuando el tiempo avanza, y tú te detienes.
Cuando el sol se oculta, y tú apareces.
Ya no eres tú, ¿lo sabes?
Un recuerdo fantasmal inunda tu rostro,
pero tu sonrisa sigue ahí, deslumbrante.
Nada fuera de lo común.
No levantes la mirada, todo sigue igual.
Yo aquí, tú allá.
Nada ha cambiado, ni siquiera tu manera de aparentar.
Desapareces, como siempre, entre la gente.
Y aunque tu sombra siga ahí,
pasas desapercibido, con esa mirada desafiante.
Sabes que el destino aun te espera,
aunque intentes evitarlo, él te guarda un lugar.
Cuando intentas ser fuerte, y tu debilidad se expande por el aire.
Y llega hasta mi cielo.
No lo olvides, un paso más y te perderás.
La brújula del tiempo ya no está de tu lado.

No olvides lo que eres por lo que anhelas ser.

jueves, 4 de junio de 2009

y entre tantas cosas...

Odio tu manera de sonreír,
como intentando demostrar una victoria inexistente.
Odio tu manera de mirar,
cuando procuras sentir que haz vencido.
Odio tu presencia
cuando aun así pareces ausente.
Odio tu orgullo forzado,
cuando quieres ocultar tu debilidad.
Odio tu forma de hacerte invencible,
cuando sabes que no es más que un disfraz.
Odio tu indiferencia,
cuando en el fondo tu sensibilidad ha ganado la batalla.
Odio tu fortaleza,
cuando tus ojos demuestran cansancio.
Odio tu seguridad,
cuando bien no sabes ni a dónde vas.
Odio tu manera de sonreír,
cuando sé que sabes que me haces quererte un poco más.